En su segundo día de recorrido por las regiones afectadas por las lluvias extraordinarias, la presidenta de México, Claudia Sheinbaum Pardo, encabezó una visita a Pinal de Amoles, en el estado de Querétaro, donde reiteró el compromiso del Gobierno Federal para atender a las comunidades damnificadas. “Seguimos en territorio; hay presupuesto suficiente para apoyar a todas las familias. Saldremos adelante”, publicó en sus redes sociales tras el encuentro con habitantes de la zona.
Durante la conferencia matutina “La mañanera del pueblo”, Sheinbaum informó que este lunes 13 de octubre recorrerá Querétaro e Hidalgo, y en los próximos días visitará San Luis Potosí y regresará al norte de Veracruz, como parte de su agenda de atención directa a las familias afectadas. El día anterior, la mandataria estuvo en Puebla y Veracruz, donde escuchó a pobladores y coordinó acciones de auxilio junto a autoridades locales.
La presidenta destacó que el Gobierno de México cuenta este año con una partida de más de 19 mil millones de pesos para atender emergencias, de los cuales 3 mil millones ya fueron destinados a Guerrero y Oaxaca, tras los daños provocados por el huracán Erick. “No estamos escatimando ningún esfuerzo, ningún apoyo. Estamos aquí para responder con todo lo necesario”, expresó.
Como parte de la estrategia de atención, este lunes se desplegaron 600 brigadas con 3 mil servidores de la nación de la Secretaría de Bienestar en los estados de Veracruz, Puebla, Hidalgo, Querétaro y San Luis Potosí, quienes realizarán el Censo casa por casa en las zonas afectadas. El objetivo es identificar las necesidades de cada familia y comenzar con la entrega de apoyos esta misma semana, que incluirán enseres básicos como refrigerador, estufa, colchón, vajilla y ventilador.
La visita a Pinal de Amoles forma parte de una jornada de trabajo que busca garantizar que las acciones de auxilio lleguen directamente a las comunidades más vulnerables. El Gobierno Federal mantiene coordinación permanente con autoridades estatales y municipales para asegurar que nadie quede en el desamparo.


