La presidenta del Senado de la República, Laura Itzel Castillo Juárez, afirmó que la sociedad mexicana tiene la obligación moral de reconocer el derecho de los adultos mayores a sentirse socialmente útiles, libres de prejuicios y discriminación por edad, y con acceso pleno a la dignidad y la inclusión laboral. “Aprovechar, pero sobre todo valorar los conocimientos y habilidades de las personas adultas mayores, así como su experiencia laboral, sin duda les permitirá seguir activos y contribuir a generar bienes y servicios útiles para la comunidad”, expresó durante la inauguración del foro “Adultos Mayores: Población Económicamente Activa sin limitaciones por edad”.
La legisladora recordó que en México viven más de 17 millones de personas adultas mayores, lo que representa el 12.8% de la población total, y que el 33% de ellas son económicamente activas. Sin embargo, enfrentan desafíos como la discriminación, la falta de oportunidades laborales formales y condiciones de trabajo precarias. Señaló además que el país tiene una mayor proporción de mujeres adultas mayores debido a su esperanza de vida más alta, y que se prevé que para 2030 este grupo poblacional alcance más del 14%, y para 2070 supere el 34%.
Ante este panorama, Castillo Juárez subrayó la necesidad de que el Poder Legislativo refuerce sus trabajos en beneficio de los adultos mayores y apruebe iniciativas que protejan sus derechos laborales. Una de ellas es la presentada por Armando Ayala Robles, organizador del foro, que propone modificar el artículo 123 de la Constitución para eliminar cualquier límite máximo de edad para laborar en el país, salvo casos justificados. “La vejez, lejos de ser una carga, trae consigo sabiduría, paz y la oportunidad para seguir contribuyendo a la sociedad; es una etapa de la vida por la que todos habremos de transitar”, enfatizó el senador de Morena.
La senadora Julieta Ramírez Padilla, del mismo grupo parlamentario, recordó que esta iniciativa ya fue avalada por la Cámara de Diputados y espera su aprobación en el Senado. Consideró que la reforma es adecuada ante el incremento de la esperanza de vida y las previsiones de que habrá más adultos mayores que jóvenes en el futuro.
Por su parte, la secretaria de la Comisión de Juventud, Alejandra Berenice Arias Trevilla, destacó que la protección a este grupo poblacional plantea retos, pero también oportunidades. “Hoy, más que nunca, debemos impulsar su inclusión económica y social. La vejez no es una etapa de exclusión, sino una etapa de oportunidad, creatividad y liderazgo, donde la experiencia de los adultos mayores se debe unir a la energía y la innovación de las personas jóvenes”, afirmó.
Con estas propuestas, el Senado busca abrir un nuevo horizonte para los adultos mayores, reconociendo su valor social y económico, y garantizando que la vejez sea una etapa de dignidad, participación y oportunidades.


