La seguridad en las carreteras poblanas es una prioridad para el gobierno estatal. En coordinación con las fuerzas armadas y los tres niveles de gobierno, la administración encabezada por Alejandro Armenta implementa operativos interinstitucionales para garantizar el libre tránsito de personas y mercancías, como parte del plan “Cero Robos en Carreteras”.

Uno de los despliegues más recientes se realizó en la autopista Puebla-Veracruz, especialmente en el punto estratégico de la caseta de Amozoc, donde más de 300 elementos de la Guardia Nacional, la Secretaría de la Defensa Nacional, la Secretaría de Marina, la Policía Estatal, Municipal y la Fiscalía General del Estado sumaron esfuerzos para combatir los asaltos en esta importante vía de comunicación.

“Es parte del Plan Cero Robos, una estrategia para erradicar los asaltos, que se ampliará con más medidas”, explicó el Capitán Segundo de la Guardia Nacional, Leoncio Alejandro Mendoza Santillán, miembro de la Coordinación de Vías de Comunicación Puebla.

El dispositivo operativo cuenta con 302 elementos, 131 vehículos terrestres, 3 helicópteros y 20 drones, con capacidad de vigilancia aérea y detección remota. Además, se incorporaron torres de inspección vehicular con tecnología avanzada, que permiten identificar en tiempo real vehículos con reporte de robo, lo que facilita la reacción inmediata de las autoridades. “Las torres de inspección permiten detectar vehículos robados rápidamente, facilitando una respuesta inmediata”, detalló Mendoza Santillán.

Estas acciones son parte de una política integral de seguridad impulsada desde el Gobierno de la República, encabezado por la presidenta Claudia Sheinbaum, y reforzada en el estado por la administración de Armenta Mier, con un enfoque preventivo y de proximidad social. A través de mesas de seguridad y coordinación interinstitucional, se definen rutas críticas, horarios de mayor riesgo y estrategias de patrullaje para mantener la vigilancia permanente.

Además de brindar protección a los ciudadanos, este operativo favorece la certidumbre económica, ya que garantiza el libre tránsito del transporte comercial y de carga. “Nuestro objetivo es que los usuarios se sientan seguros, lo que también impulsa la economía y la paz en la región”, concluyó el capitán Mendoza.

Con este tipo de acciones, el gobierno de Puebla avanza en la construcción de un entorno de seguridad, confianza y desarrollo, donde las carreteras dejan de ser puntos vulnerables y se transforman en corredores de paz y prosperidad para toda la entidad.