Desde Zinapécuaro, Michoacán, la presidenta de México, Claudia Sheinbaum Pardo, dio el banderazo de salida al programa Cosechando Soberanía, una nueva iniciativa del Gobierno Federal para impulsar la autosuficiencia alimentaria y fortalecer la producción agrícola nacional. Con el objetivo de aumentar la producción de maíz y frijol, entre otros productos esenciales, el programa brindará apoyos directos a pequeños y medianos productores del campo, incluyendo créditos con una tasa de interés máxima de 8.5 por ciento, asesorías, seguros contra fenómenos climáticos y la garantía de comercialización de los productos a precios justos.
En su intervención, Sheinbaum destacó que Cosechando Soberanía no solo se trata de entregar créditos, sino de ofrecer un apoyo integral que permita a los productores mejorar sus condiciones y expandir su capacidad productiva. “Todo el que reciba el crédito va a tener garantizado la compra de su producto a buenos precios, precio justo. Este es un programa integral, que no solo ofrece créditos, sino asesoría, seguros y la garantía de que tendrán un mercado para vender lo que producen”, aseguró.
El objetivo principal del programa es que México sea capaz de producir lo que consume, fortaleciendo su mercado interno y protegiendo la soberanía alimentaria. En este sentido, Sheinbaum explicó que este impulso a la producción de maíz y frijol es crucial para hacer frente a cualquier desafío económico o comercial, ya que, según ella, “que en México se produzca lo que consumimos los mexicanos, es la mejor defensa frente a cualquier arancel, cualquier cosa”.
La Presidenta también resaltó que Cosechando Soberanía complementa otras políticas públicas ya existentes para fortalecer el campo mexicano, como el programa Producción para el Bienestar, que beneficia a más de 2 millones de productores, el programa Sembrando Vida, que actualmente apoya a más de 400,000 campesinos, y la entrega de Fertilizantes del Bienestar.
Por su parte, el secretario de Agricultura y Desarrollo Rural, Julio Berdegué Sacristán, explicó que los créditos otorgados bajo este programa contarán con una tasa de interés máxima de 8.5 por ciento, gracias a la reducción de tasas en el Banco de México. Informó que el programa beneficiará a 300,000 productores, y que en Michoacán se incrementará el número de Escuelas de Campo, de 153 a 300, con un enfoque agroecológico y comunitario, lo que permitirá a los campesinos aprender prácticas más sostenibles y eficientes en sus cultivos.
Berdegué también detalló las metas de producción para los próximos años: aumentar la producción de maíz blanco de 21.3 millones de toneladas a 25 millones en 2025, elevar la producción de frijol de 730,000 toneladas a 1.2 millones, y expandir la producción de leche de 13,000 millones de litros a 15,000 millones de litros, a través de Liconsa, que se convertirá en Leche para el Bienestar, con el objetivo de duplicar su compra a pequeños productores.
En el evento, el gobernador de Michoacán, Alfredo Ramírez Bedolla, agradeció el compromiso de la Presidenta con el campo michoacano y destacó la importancia del programa para el desarrollo rural en la región. “Gracias a este programa, los productores tendrán el apoyo necesario para seguir adelante y mejorar sus cosechas”, afirmó.
Elvia Nonato Reyes, productora de maíz y beneficiaria de programas como Sembrando Vida y Fertilizantes para el Bienestar, compartió su experiencia positiva, al haber duplicado la producción de su parcela, pasando de una a dos toneladas, y confió en que con el programa Cosechando Soberanía, logrará triplicar su producción. Agradeció también los ahorros obtenidos gracias al uso de bioinsumos y la entrega de fertilizantes.
Este evento estuvo acompañado de importantes figuras del gobierno, como la secretaria de Bienestar, Ariadna Montiel Reyes; el subsecretario de Agricultura y Desarrollo Rural, Leonel Cota Montaño; el secretario técnico de la Presidencia, Carlos Torres Rosas; y otros funcionarios clave en la ejecución de los programas para el bienestar del campo.
Con Cosechando Soberanía, el gobierno de Sheinbaum reafirma su compromiso con la soberanía alimentaria de México, asegurando que el país sea capaz de producir lo que consume, mejorar las condiciones de vida de los productores rurales y enfrentar con fortaleza las dinámicas comerciales globales.