En el marco del Día Internacional de la Mujer, la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) reiteró su compromiso con la igualdad sustantiva de género, al llevar a cabo una serie de actividades que incluyen movilizaciones simbólicas, eventos deportivos y acciones institucionales para visibilizar la lucha de las mujeres en todos los ámbitos, incluido el deporte.

Uno de los momentos más significativos fue la asistencia de alrededor de 10 mil personas al Estadio Olímpico Universitario para presenciar el partido entre el equipo femenil de Pumas y Mazatlán, en una jornada en la que el púrpura, color emblemático de la lucha feminista, tiñó la Ciudad Universitaria.

El rector de la UNAM, Leonardo Lomelí Vanegas, acudió al encuentro y ofreció unas palabras en las que reconoció los avances de la Universidad en materia de género, pero también la necesidad de continuar trabajando:

“Este día es para reconocer lo alcanzado, pero también para tomar conciencia de que tenemos que seguir trabajando, en todos los ámbitos, para lograr el pleno reconocimiento a la igualdad de género y para abrir más espacios a la participación de la mujer”, afirmó.

El rector también destacó el papel transformador de la UNAM en la sociedad mexicana: “En más de un sentido, la Universidad ha propiciado cambios que se han ido reflejando en otros sectores sociales. Las mujeres universitarias han sido clave en esta evolución”, subrayó.

¡Juntas somos más Pumas!

Con el lema “¡Juntas somos más Pumas!”, cientos de mujeres de la comunidad universitaria se sumaron a una caminata simbólica en el casco central de Ciudad Universitaria, que concluyó en el Estadio Olímpico Universitario. El contingente estuvo integrado por aproximadamente 200 estudiantes, académicas, funcionarias y directoras de distintas entidades, todas vestidas con prendas moradas y portando mensajes de apoyo a la igualdad de género.

Entre ellas destacaron Patricia Dávila Aranda, primera secretaria General de la UNAM, y Ana Carolina Sepúlveda Vildósola, primera mujer en dirigir la Facultad de Medicina. Ambas encabezaron el contingente principal y reafirmaron el compromiso de cerrar filas en favor del reconocimiento y la participación de las mujeres en todos los niveles de la vida universitaria, incluido el ámbito deportivo.

“El deporte es importante para todo ser humano, y las mujeres han demostrado que también destacan en esta actividad. En la UNAM debemos apoyar firmemente el deporte femenil y cerrar filas por su visibilidad”,expresó Dávila Aranda.

En otro grupo, Tamara Martínez Ruíz, secretaria de Desarrollo Institucional, participó activamente acompañada por la batucada de la Dirección General de Atención a la Comunidad (DGACO). Enfatizó que esta clase de actos deben repetirse cada vez que las mujeres pumas tengan actividad deportiva:

“La Universidad ha cambiado: hemos logrado paridades en muchos cuerpos colegiados y en espacios de toma de decisiones. Eso es fundamental. ¿Nos falta mucho aún? Sí, pero vamos en el camino correcto”,afirmó.

La jornada también incluyó un desfile previo al partido, con la participación de 597 alumnas deportistas y 71 entrenadoras y entrenadores que representan a la UNAM en diversas disciplinas. Las atletas realizaron una vuelta olímpica en la pista de tartán del estadio, en un acto simbólico de reconocimiento y visibilidad.

Joaquín Narro Lobo, titular de la DGACO, señaló que estas acciones buscan visibilizar las desigualdades históricas que han enfrentado las mujeres y, al mismo tiempo, fortalecer el compromiso comunitario por espacios universitarios más justos:

“El Día Internacional de la Mujer es una ocasión propicia para visibilizar desigualdades, pero también para reafirmar el compromiso institucional de hacer de la Universidad un espacio más igualitario”, expresó.

Narro también destacó los avances que se han logrado en términos de representación femenina: actualmente hay más directoras que nunca en la historia de la UNAM, y la Junta de Gobierno cuenta con mayoría de mujeres. “Esto es una realidad del siglo XXI que debe ser asumida y defendida por las y los jóvenes universitarios”, dijo.

Finalmente, el presidente del Club Universidad Nacional, Luis Raúl González Pérez, hizo entrega de una playera conmemorativa a la jugadora Laura Herrera, por haber alcanzado 100 partidos jugados con el equipo femenil, un reconocimiento al esfuerzo, la constancia y el profesionalismo en una liga que cada vez gana más terreno y público.

La victoria del equipo femenil de Pumas sobre Mazatlán selló una jornada de alto simbolismo en la que la UNAM no solo honró el 8M desde la palabra y la reflexión, sino también desde la práctica, la comunidad y el respaldo institucional.

La Universidad Nacional reafirma así su vocación como agente de cambio, consciente de los desafíos pendientes pero firme en su compromiso por una sociedad más equitativa, diversa y sin violencia.