Durante cuatro días, la ciudad de Mérida fue sede del 2º Encuentro Interestatal Zona Sur “Palabra, Voz y Mediación Lectora”, que reunió a más de 200 mediadoras y mediadores de lectura provenientes de seis estados del sur y de comunidades originarias de 13 entidades. El evento se convirtió en un espacio de reflexión sobre el hábito lector, la preservación del patrimonio cultural y la creación de redes interculturales.

El encuentro fue impulsado por el Fondo de Cultura Económica (FCE) y el Programa Nacional de Salas de Lectura (PNSL), en reconocimiento al respaldo que el Gobierno del Estado de Yucatán, a través de la Secretaría de la Cultura y las Artes (Sedeculta), brinda a quienes promueven la lectura como un derecho cultural. “La lectura es un puente entre generaciones, saberes y territorios”, expresaron las y los participantes en las mesas de trabajo.

Actualmente, Yucatán cuenta con más de 150 salas de lectura activas, incluyendo espacios bilingües que promueven la lengua maya y los saberes comunitarios. Tan solo en 2025 se han abierto 30 nuevos espacios, fortalecidos con capacitación, acompañamiento y acervos literarios.

Entre las figuras destacadas que participaron se encuentran Paloma Saiz Tejero, fundadora de la Brigada para Leer en Libertad; la escritora y pedagoga Norma Muñoz Ledo; el director general del FCE, Paco Ignacio Taibo II; y el sociólogo y escritor Armando Bartra, quienes dialogaron sobre la importancia de difundir lecturas críticas de la historia de México y América Latina.

Las actividades se desarrollaron en el Centro Cultural del Mayab, la Biblioteca Yucatanense y el Local Social y Cultural del Isstey, e incluyeron talleres, conversatorios y la presencia del Librobús del FCE, que durante tres días ofreció títulos a precios accesibles.

El encuentro concluyó con propuestas para fortalecer las salas de lectura en pueblos originarios como espacios de identidad y preservación cultural. Desde esta perspectiva, Yucatán se consolida como impulsor de redes que promueven el diálogo intercultural y el acceso equitativo a la lectura.