En el cierre de su informe legislativo, el senador Gerardo Fernández Noroña agradeció a sus hermanos Raúl, Manuel y Mónica, así como a sus sobrinas Aura y Tamara —quien decidió quedarse afuera con la gente— por acompañarlo en su trayectoria política. “Mucho los quiero y siempre me han acompañado en este proceso de transformación”, expresó conmovido.

“Larga vida a la unidad de Morena, PT y Verde”

Con tono firme y emotivo, Noroña reafirmó su compromiso con la unidad del movimiento que encabeza la Cuarta Transformación. “Larga vida a la unidad de Morena, PT y Verde. Larga vida al irredento y rebelde pueblo de México”, proclamó.

Destacó que durante el primer año legislativo, los senadores y senadoras de la coalición Juntos Hacemos Historia estuvieron a la altura de la responsabilidad, honrando los compromisos de campaña y defendiendo los sueños del pueblo desde la primera línea de batalla.

Reforma judicial: “Una hazaña histórica”

Uno de los momentos más destacados fue la defensa de la reforma judicial, que permitirá que México sea el primer país en el mundo en elegir por voto directo a jueces y magistrados. “Nos dijeron que era imposible, nos ridiculizaron. Hoy es una hazaña histórica”, afirmó.

Recordó que la oposición intentó boicotear la reforma, incluso tomando por la fuerza la tribuna del Senado. Criticó a la Suprema Corte por “extralimitarse en sus funciones” y por intentar modificar la Constitución sin facultades legales.

Hugo Aguilar Ortiz: símbolo de justicia indígena

Celebró que el nuevo presidente de la Suprema Corte será Hugo Aguilar Ortiz, abogado mixteco originario de Oaxaca, quien asumirá el cargo el 1º de septiembre. “Desde Benito Juárez no había un indígena presidiendo la Corte. Hoy, el pueblo lo eligió”, dijo Noroña

Aguilar ha prometido una Corte austera, abierta al pueblo y sin compromisos partidistas. “Vamos a hacer mucho con poco”, declaró en su primera conferencia como presidente electo.

“Con o sin cargo, seguiré luchando”

El senador cerró su discurso con una promesa clara: “Con o sin cargo, yo voy a luchar hasta el último segundo de mi existencia por la transformación del país”. Agradeció al pueblo de México por permitirle servir con honor, principios y entrega, y pidió comprensión por cualquier fallo: “Somos seres humanos con virtudes y defectos, pero dimos lo mejor de nosotros”.

Reconoció el trabajo de sus compañeras y compañeros senadores, diputadas y diputados, así como del personal del Senado, desde el más humilde trabajador de limpieza hasta quienes ocupan las más altas responsabilidades.

“Aquí manda el pueblo”

En un mensaje que resonó dentro y fuera del recinto, Noroña reiteró que el centro del movimiento es el respeto a la dignidad humana: “Todas y todos valemos lo mismo. Nadie, por poderoso que sea, tiene derecho a pasar por encima de la dignidad de ningún ser humano”.

Concluyó con una reflexión profunda: “Cuando nos chupe la bruja, nada nos llevaremos. Solo quedará en nuestro corazón lo que hicimos en bien de nuestro pueblo y de nuestra patria”.