Desde Tepeapulco, Hidalgo, la Presidenta de México, Claudia Sheinbaum Pardo, encabezó una asamblea con más de 200 facilitadoras y facilitadores de la salud como parte del programa Salud Casa por Casa, el cual busca garantizar atención médica a personas adultas mayores y con discapacidad, directamente en sus hogares.
“Este programa del que ustedes forman parte surge de una visión de que todas y todos los adultos mayores deben tener acceso a la salud, que no debe de ser un privilegio, que no tienen por qué gastar recursos para poder tener acceso a la salud. Es una visión en donde todas las personas con discapacidad puedan tener un apoyo del gobierno y, además, tener acceso a la salud”, expresó la mandataria.
Salud Casa por Casa forma parte del compromiso número 55 de su gobierno: la creación de un Sistema Nacional de Cuidados, que contempla no solo la prevención de enfermedades, sino también la atención oportuna de padecimientos en sectores de la población que históricamente han sido desatendidos. Este sistema incluye también la construcción de 200 Centros de Educación y Cuidado Infantil (CECI) para que niñas y niños estén protegidos mientras sus madres ejercen su derecho al trabajo.
Durante el evento, Claudia Sheinbaum fungió como testigo de honor en la firma del convenio de colaboración entre la Secretaría de Bienestar y el ISSSTE, que formaliza la participación del Instituto en este programa. Con ello, el ISSSTE recibirá en sus unidades médicas a los derechohabientes que sean referidos por los facilitadores de la salud.
“Salud Casa por Casa se convertirá en el programa de prevención y atención a la salud más ambicioso y completo del mundo”, afirmó la Presidenta, al tiempo que reconoció la labor de quienes ya participan en esta estrategia en distintas regiones del país.
El secretario de Salud, David Kershenobich, destacó el carácter profundamente humano del programa: “Es un programa con un profundo humanismo y del cual estarán muy agradecidos los adultos mayores y las personas con discapacidad.”
Por su parte, la secretaria de Bienestar, Ariadna Montiel Reyes, señaló que se trata de una estrategia pensada a largo plazo: “Este programa forma parte de la visión de la Presidenta para que toda la población mexicana que llegue a la vejez lo haga de manera digna y saludable.”
El director general del IMSS, Zoé Robledo Aburto, subrayó que con este programa se recupera la atención primaria y la prevención, “una deuda que los gobiernos neoliberales dejaron pendiente”. Ahora, dijo, se lleva la atención directamente a los hogares, beneficiando a quienes reciben pensiones por discapacidad o por ser personas adultas mayores.
El titular del IMSS Bienestar, Alejandro Svarch Pérez, reconoció el papel clave de los trabajadores comunitarios: “Los cerca de 20 mil facilitadores de la salud son los auténticos protagonistas de la transformación de la salud que vive el país.”
El director del ISSSTE, Martí Batres Guadarrama, destacó que con este convenio se integra formalmente el Instituto a una de las estrategias prioritarias del gobierno federal.
En su intervención, el gobernador de Hidalgo, Julio Menchaca Salazar, agradeció los proyectos impulsados por la Presidenta en la entidad, entre ellos el Tren México-Pachuca, el Plan Hídrico y el programa de Vivienda para el Bienestar, que están transformando la vida de miles de familias hidalguenses.
Durante la asamblea también participaron el secretario técnico de la Presidencia, Carlos Torres Rosas; el subsecretario de Bienestar, Jesús Salvador Valencia Guzmán; y la facilitadora de la salud Britney Hernández Ángeles, quien explicó el contenido del maletín médico que se entrega a quienes recorren las comunidades brindando atención primaria.
El programa Salud Casa por Casa representa un paso concreto hacia un sistema de salud más inclusivo, territorial y justo, centrado en el bienestar de quienes más lo necesitan.
