Foto: Gobierno de la Ciudad de México
En el Monumento a la Revolución, la Jefa de Gobierno, Clara Brugada Molina, encabezó el arranque del programa “Mujeres Sanas, Infancias Protegidas”, una estrategia inédita en México que busca acompañar a mujeres embarazadas con un enfoque integral de salud, bienestar y cuidado, como parte del Sistema Público de Cuidados de la capital.
Durante el evento, Brugada anunció que 9 mil 400 mujeres embarazadas ya forman parte de la primera generaciónbeneficiaria de este esquema, que incluye un apoyo económico bimestral de mil 200 pesos, seguimiento médico, acompañamiento emocional y talleres para una crianza respetuosa.
“En esta ciudad, ninguna mujer está sola. La salud materna es una prioridad y estamos construyendo una ciudad que pone al cuidado en el centro de la política pública”, expresó la mandataria capitalina.
El programa contempla visitas domiciliarias por parte de personal de la Secretaría de Salud para brindar información, detectar señales de alerta, promover la lactancia y realizar tamizajes neonatales. La meta, adelantó Brugada, es llegar gradualmente a una cobertura universal de 90 mil embarazadas.
Hacia una política estructural de cuidados
La jefa de Gobierno adelantó que en próximos días presentará una iniciativa para convertir en ley el Sistema Público de Cuidados, a fin de garantizar que ningún gobierno futuro pueda revertir estos avances.
En paralelo, se construyen 300 centros de cuidado y desarrollo infantil, casas de día para personas mayores, lavanderías públicas gratuitas y comedores comunitarios, con el objetivo de reducir la carga de trabajo doméstico y de cuidadosque históricamente ha recaído sobre las mujeres.
Araceli Damián, titular de la Secretaría de Bienestar e Igualdad Social (Sebien), señaló que este programa coloca a la Ciudad de México a la vanguardia en América Latina, al priorizar el bienestar desde la gestación hasta la primera infancia.
Citlalli Hernández Mora, secretaria de las Mujeres, calificó la estrategia como “una apuesta por el futuro del país”, al ofrecer condiciones más equitativas desde el nacimiento.
“Apoyar a las embarazadas desde el inicio es cuidar a las futuras generaciones. La fuerza de un país radica en cómo crecen sus niñas y niños, y eso comienza desde antes de nacer”, afirmó.