Propuestas innovadoras de estudiantes de la UNAM ante desastres, reconocidas por la ONU

Foto: Dirección General de Comunicación Social UNAM

¿Qué pasaría si las grietas del pasado destrozaran nuestro futuro? Con esa pregunta provocadora, estudiantes de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) presentaron un video en formato TikTok que fue seleccionado por la Oficina de las Naciones Unidas para la Reducción del Riesgo de Desastres (UNDRR) como ejemplo de pensamiento estratégico juvenil en la Plataforma Global PG2025, celebrada en Ginebra, Suiza.

El proyecto fue desarrollado en el Taller Foresight Sprint, un ejercicio de prospectiva dirigido por los académicos Irasema Alcántara Ayala y Ricardo Javier Garnica Peña, del Instituto de Geografía. Participaron estudiantes de licenciatura, posgrado y escuelas nacionales de la UNAM, quienes imaginaron un escenario sísmico extremo en la Ciudad de México en el año 2050.

🌍 Escenario crítico: sismo de magnitud 9.0 y colapso sistémico

El grupo interdisciplinario construyó un escenario en el que un sismo de magnitud 9.0 desencadena:

  • Fallas en infraestructura crítica
  • Apagones masivos
  • Desabasto de agua
  • Deslizamientos de tierra
  • Brotes epidémicos

 

Pero el foco del desastre no es solo el evento natural. “Las vulnerabilidades acumuladas por décadas de desigualdad, expansión urbana no regulada, debilitamiento institucional y degradación ambiental son las verdaderas causas”, explicó Alcántara Ayala.

🎓 Voces jóvenes, propuestas concretas

Los estudiantes propusieron una hoja de ruta hacia la resiliencia:

  • Corto plazo: investigación forense de desastres para corregir fallas estructurales
  • Mediano plazo: inversión en salud y educación
  • Largo plazo (2050): transformación de zonas de riesgo en espacios seguros mediante memoria histórica, justicia social y restauración ecológica

“Es complicado, pero necesario empezar desde hoy”, señaló Ana Gabriela Díaz Serrato, estudiante de Geografía Aplicada.

🤝 Vinculación internacional y territorial

El equipo dialogó con pares de universidades de Estados Unidos, Chile, Brasil, Reino Unido y Colombia. “Fue inspirador ver cómo distintas juventudes analizamos escenarios futuros desde nuestras realidades”, comentó Adaia Magdalena Martínez Noguez.

Para Leilany Granados, estudiar geografía implica entender cómo se construye el riesgo desde decisiones humanas. “Hay que hablar con las personas, empatizar con ellas, porque son quienes mejor conocen su territorio”, afirmó.

🧭 Anticipar como acto ético y científico

La participación fue posible gracias a la invitación de la ONU a integrantes del Grupo Asesor Regional de Ciencia y Tecnología de la UNDRR para las Américas y el Caribe, del cual forma parte Alcántara Ayala. El video será alojado en la página oficial de la UNDRR como recurso educativo.

“Anticipar es una tarea científica, pero también un ejercicio de ética, justicia y responsabilidad colectiva”, concluyó la investigadora.

Este ejercicio demuestra que la juventud mexicana no solo imagina futuros posibles, sino que propone caminos concretos para evitar que los desastres se repitan. Porque como bien dijeron: los desastres no son naturales, son resultado de decisiones y omisiones.

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